EL ARBOL DE LA VIDA
El canal cervical tiene forma de huso. La mucosa del canal se dispone en pliegues que protuyen en la cavidad. Las caras anterior y posterior del canal presentan cada una un pliegue longitudinal vertical, de los que parten pliegues oblicuos dando a la mucosa un aspecto de árbol llamado “plicae palmatae” o “arbor vitae uteri”, es decir el “árbol de la vida del útero”. ¡Nada podía ser más poético!
El canal cervical está recubierto por endocérvix, una mucosa formada por un estroma conjuntivo y un epitelio de revestimiento que forma una especie de criptas que penetran en el estroma. Este epitelio está formado por células cilíndricas mucíparas que secretan moco al canal.
El exocérvix, ectocérvix, u hocico de tenca es la porción del cérvix que sobresale a la vagina, y a diferencia del endocérvix, tiene un epitelio estratificado plano. La zona de cambio entre el epitelio cilíndrico del endocérvix y el epitelio escamoso del exocérvix se denomina zona de transformación. Esta zona cambia a lo largo de la vida: en las mujeres en edad fértil está situada justo por fuera del OCE, y antes de la pubertad y después de la menopausia la zona de transformación está dentro del conducto endocervical. Tiene especial relevancia porque en esta zona comienzan los procesos cancerosos del cérvix.
El endocérvix está cubierto por tres tipos celulares:
- Células secretoras productoras de moco situadas en las criptas.
- Células ciliadas en la superficie de la mucosa encargadas del ascenso y eliminación de los espermatozoides.
- Células de reserva: en la base de las otras células para renovarlas.
UN HIDROGEL QUE CAMBIA SEGÚN LAS NECESIDADES
El moco cervical producido por las células cilíndricas es un hidrogel compuesto por dos fracciones:
- Fase acuosa: formada por agua (varía a lo largo del ciclo aumentando en la ovulación hasta un 98%), electrolitos y componentes orgánicos de bajo peso molecular: proteínas solubles, aminoácidos, glucosa (aumenta con la ovulación), sales (como ClNa), elementos celulares procedentes de la descamación del endocérvix, leucocitos (fagocitan los espermatozoides y gérmenes, abundantes al inicio y final del ciclo).
- Fase de gel: compuesta por moléculas de alta masa molecular: glucoproteínas (mucinas), que se asocian entre sí, formando estructuras como redes.
Las mucinas de la secreción cervical tienen gran capacidad para hidratarse, y tienen la propiedad de excluir a moléculas grandes y microorganismos. Las mucinas responden a los niveles de esteroides sexuales, de forma que la ultraestructura del moco varía durante el ciclo menstrual. ¡El moco se organiza como una malla laxa con canales que cambian dependiendo del momento del ciclo para facilitar o dificultar el paso de los espermatozoides! Durante la ovulación las fibras de la red se alargan y dejan huecos para que los espermatozoides penetren, y en la fase secretora o bajo el efecto de infecciones/inflamaciones la malla se hace densa y cerrada y no permite su paso.
El estradiol consigue una secreción abundante, transparente, limpia y fluida, denominado moco “E”, del que hay varios subtipos: EL, ES, EP.
La progesterona consigue una secreción opaca, poco filante, sin capacidad de cristalizar y viscosa, denominada moco “G”.
HELECHOS, ESTRELLAS Y AUTOPISTAS DE ESPERMATOZOIDES
En la secreción cervical podemos observar estas características:
- Filancia (spinbarkeit): es la capacidad de extenderse para formar hilos. Es máxima en la etapa ovulatoria. El moco puede estirarse desde unos pocos centímetros en la fase pre u postovulatoria, a 20 cm en la ovulación. Los estrógenos aumentan la filancia y los gestágenos la disminuyen.
- Elasticidad: capacidad del moco de mantener su forma y tamaño cuando se aplica una fuerza.
- Viscosidad: resistencia a fluir. Es viscoso cuando la mujer está bajo el influjo de la progesterona, en la segunda fase del ciclo.
- Cristalización: esta propiedad se observó por primera vez por Papanicolau en 1946. Es la capacidad de la secreción a hacer maravillosos cristales cuando está bajo el influjo estrogénico, en la primera mitad del ciclo. La cristalización es máxima en el momento de la ovulación. ¡Cristaliza en diferentes formas trazando patrones ordenados como palmeras, helechos o estrellas!
Basado en los estudios de Odeblad, el moco E se divide en subgrupos:
- EL “loaf-shaped (forma de pan)”: da una forma similar a una hoja de palma o helecho con un eje central y ramificaciones en ángulos de 90º. Evita el ascenso de espermatozoides anormales.
- EP “peak (forma de pico)”: los cristales tienen un eje central y ramificaciones en ángulo de 60º. Se observa el día de cúspide estrogénica. Hay varisos subtipos del moco P, de los que destacamos el EP6B con una geometría similar a una estrella de 6 ejes.
- ES “string-shaped (forma de cuerda)” o “sperm-conveying (transportador de esperma)”: sigue un patrón de finas líneas paralelas, en respuesta a la elevación de los estrógenos, es muy fluido y los espermatozoides pueden migrar rápidamente a través de él.
- Celularidad: en la fase ovulatoria es escasa. En la secreción cervical hay leucocitos y células endocervicales. Cuantos más leucocitos menor penetración de los espermatozoides.
- pH: oscila entre 7 y 7,2, es máximo en la fase ovulatoria. Un pH ácido se ha relacionado con menor receptividad del moco al esperma.
Las características de la secreción endocervical son muy importantes en el proceso reproductivo. Su composición y los cambios a los que está sometida según la fase del ciclo en la que la mujer se encuentre parecen arte de magia.
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